Y ayer en un estado febril fui al teatro a ver a Chucho Valdés y Diego el Cigala. A pesar de estar en el anfiteatro pude hacer alguna foto decente. Aunque el disco lo grabó con Bebo Valdés ayer acompañaba al Cigala su hijo Chucho. Creo que salimos ganando todos. Chucho Valdés fue el auténtico protagonista del concierto; Diego Cigala cantó bien pero Chucho tocó cómo yo nunca antes había oído tocar el piano. Impresionante. La banda que los acompañaba eran unos fuera de serie. Percusión, contrabajo y los cajones. Las dos primeras canciones (que fueron sin Diego) fueron portentosas. Al Cigala parece que se le han subido mucho los humos y se le vieron detalles muy muy feos; trataba a la banda (y al pobre técnico de sonido) de muy malas maneras. La gente le reía las gracias...en fin....; sólo por ver a Chucho Valdés ya mereció la pena ir al teatro.
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